Tuesday, June 17, 2008

tan-tan-TA-tannn

Es el sueño de todas las princesas, casarse con su príncipe azul. Es el mío, el tuyo, el de la mayoría ---para no decir de todas---. Pero, ¡¿por qué hay que sertirse mártir para pasar el resto de tu vida con tu "a-do-ra-do"?! ¡Qué irritante...!

Qué irritante es ver conocidas casarse sin haber hecho nada de lo que tienen 20 años planeando. No entiendo cómo es que lo olvidan todo en 1 ó 2 años de novias con un tipo, conformándose con ir y venir del trabajo, ir al gimnasio ---al mismo que él va, aunque haya tenido que cambiarse---, comprarse ropa todas las semanas siempre pensando en qué le agrada a su "macho" ---y ni mirar lo que no le gustaría que se pusiera, aunque a ella le fascine y le quede como anillo al dedo---.

Ah, el anillito. Hay quienes sencillamente planean su boda... El anillo de "compromiso", el aro de bodas... todo eso que llegue lueguito. Pueden entregárselo el mismo día en plena iglesia justo antes de la foto, y está perfecto para ellas.

Las niñas que están ¡a una llamada de distancia! Tienen la ceremonia "armada" ---vestido, peinado, maquillaje, damas de honor, mil invitados, el espacio en En Sociedad, los "trastes" de la nueva casa, la sexy ropa interior de la "primera noche"---, ¡todo! Cuando algún "afortunado" aparece, pues solo tiene que ponerse su elegante traje de pingüino ---que ella ya tiene alquilado---, casarse y ¡listo! Felices para siempre... Ajá...

Se casaron. Bien. Lograron su objetivo. Ahora, a atender al niño... mientras llegan los hijos. Olvidan que tienen una vida porque todos los días llegan del trabajo, tienen que hacer la cena, recoger la casa, prepararse para el otro día ---plancharle todo al marido, porque él ahora dice que no quiere señora para el servicio en su casa; que prefiere que "su amorcito" se lo haga todo---. Ya todo esto debe bastar como el ejercicio que necesitan para verse bien. ¿Gimnasio? Muy cansada... Él sí sigue yendo...

Ay, cuando llegan los hijos. Claro que son una bendición del cielo y fuera genial que ambos se ensuciaran las manos con ellos. Pero, no. Para eso está mami. Papá tiene que trabajar para llevar el pan de cada día a la casa, mientras mamá atiende a los angelitos ---que solo comen, ca..., corretean, chillan; pronto van al colegio, serán adolescentes, y se irán de casa---. La aventura es para los dos. Pero, no, no, no. El Señor de la casa tiene muchas reuniones, viajes... Y de repente, una familia en paralelo. Después de 20 años de casados: ¡puf! El ama de casa ya no es suficiente para él. Dedicó su vida a sus hijos, descuidaron al Señor, se descuidaron ellas, y ahora: adiós, good-bye, my friend!

Nos crían para estas cosas desde pequeñas. Aunque la historia diga que seremos miserables y esclavas, nos siguen haciendo creer que estas cosas son normales. ¡No!

Cuando él sale, es porque necesita su espacio. Si salen ellas, tienen que llenar una hoja de información de salida, sus esposos las llevan y las buscan a todas partes, y claro, tienen que estar siempre disponibles cuando ellos quieren salir con ellas, aunque les hayan dicho que no a ellas cuando los invitaron al cine. ¿Por qué vivir esperando que ÉL quiera darte de su tiempo? Al principio del noviazgo se moría por hacerte feliz. Después de la boda, pues, ya cree que te hizo feliz con eso... "¡¿Qué más querría mi mujer de mí?! ¡Ya estamos casados!"

Las nenas empiezan a olvidarse de ellas mismas: ¿para qué ir al salón, depilarse cada dos semanas, ir al salón, vestirse como les gusta... ? Ya tienen a su hombre con ellas. Todo eso está de más. Hasta que ellos andan detrás de las faldas de las más osadas y de las que no se olvidan de siempre lucir femeninas, despampanantes, ¡lindas! Y entonces, ahí viene la mega-noticia: "Ella me obligó a serle infiel: ya no se arregla, no me "atiende" de noche, casi ni me habla, no salimos, no le interesa nada de lo que hago, no hablamos más que de los niños, solamente hace los "oficios" de la casa... Necesito una compañera, una esposa... no otra madre". Para colmo, ellas piensan: "¡¿Cómo pasó esto?! ¡Yo creía que estábamos enamorados!"

Otra, típica: el "compañero de vida" al que le caen mal todas las amigas de su mujer ---y ni hablemos de los amigos---. No se puede invitar amistades a casa porque el quiere pasearse en la sala solo usando sus briefs. Él, está en su casa. ¿Y ellas, dónde están? Pues, en la casa de ÉL, no de los dos: "Ay, vamonos para la cocina, porque hay que hacerle cena al Señor, y un chocolate, y plancharle las medias... Bueno, mejor vete, amiga, que tengo que bañarme, afeitarme y perfumarme, antes de las 8pm...".

¡Basta! Sí quiero casarme. Pero, ¿qué tiene de malo que prefiera dos baños, uno para cada uno, dentro de la habitación principal? Tanto mi cariñito como yo necesitamos nuestro espacio. Los dos debemos comprometernos con la relación, asumir nuestras responsabilidades en casa, mimarnos el uno al otro, planear nuestras vidas juntos respetando los proyectos de cada uno. ¿Cómo voy a dejar de trabajar solo para quedarme sentadota en casa? Una cosa es que tome mis meses tranquilita después de tener nuestros bebés, pero no dejar mi vida completamente de lado.

¡Somos dos! No es él solo ni yo sola. No necesito salir de mi casa y dejar de oir a mi madre y padre diciéndome siempre lo que tengo que hacer, para casarme con alguien que me controle mucho más de ahí.

Debemos hacer realidad esos sueños de toda la vida, solteros. Y buscarnos alguien que nos complemente, que nos ayude a crecer, que nos ame exactamente como somos. Casarnos por amor, pasión, intimidad, con conciencia de lo que hacemos. Dar lo mejor de nosotros a esa persona, pero sin dárselo todo hasta que nos quedemos sin nada. Si damos todo, ¿qué dejamos para nosotros? ¿Qué le seguiremos ofreciendo a esa persona y a las demás?



[everybody needs some rush in their life .. i enjoy it every second]

3 comments:

Anonymous said...

"Dar lo mejor de nosotros a esa persona, pero sin dárselo todo hasta que nos quedemos sin nada"
esa es LA ESENCIA.

Me causo mucha impresión una frase que leí de un libro "Extrañando a DINA" Debo aprender, entender y aceptar muchas cosas, pero sobre todo Debo aprender... que nunca dejaré de aprender, y mientras continuo aprendiendo debo permitirme vivir y sentir.

Soy amiga, novia, familia, empleada... Y trato de darle a cada rol su espacio individual, eso lo olvidamos la mayoria de veces.

Dahyana

Marylin Ninoska™ said...

¡Totalmente de acuerdo contigo, Dahy!

:)

Anonymous said...

TE PASAS...MUY BUENO

Lolita =)